
Los colores primarios se creen importantes y superiores; dicen ser los enviados del dios Cromo en la tierra y se arrogan, en cuanto pueden, esa supuesta divinidad mundana.
Pero este año, un grupo de detractores decidieron atacar sin piedad a uno de los endiosados colores, hartos de soportar el egocentrismo del señor rojo. Entonces urdieron un siniestro plan para bajar del pedestal al engreído narciso de un sopetón. Esperaron con impaciente ansiedad el momento en que el rojo dirigiera su discurso a toda la concurrencia. Ni bien se acomodó en el estrado, los coléricos anarquistas corrieron con prisa las cortinas del ventanal, dejando que el sol brillara en todo su esplendor.
Los rayos dotaron al rojo de una luminosidad poco conocida hasta entonces, su potente tonalidad había sido corroída por el intruso visitante. El rojo, furioso, comenzó a llorar desconsoladamente, viendo como el resto de sus familiares se reían de su desgracia.
Lo cierto es que ese mismo año fue toda una sensación en los desfiles de moda, en las calles, en las oficinas, en las casas, en los centros comerciales las mujeres lucían orgullosas atuendos del desdichado color. Ahora el rojo chillón estaba en todas partes, ya no era el único y esa fue su condena.
Diego Raffaelli
5 comentarios:
Vaya, veo que nuestro estreno ha sido, prácticamente, simultáneo.
Que disfrutes mucho con tu "criatura".
¡Ah! Y siento haberte "robado2 el título.
Bonitas palabras
Gracias a las dos por pasaros por aquí.
La "criatura" tiene ya casi cuatro meses, jajajaja.
Se hace lo que se puede, depende también mucho del tiempo que una tiene para dedicarle, pero se le puede coger cariño como a los animales de compañia.
Saludos
Es una criatura magnífica, como todo lo que hace esta mujer. ;)
Publicar un comentario