miércoles, septiembre 27, 2006

fui


Me he encontrado en la red con estas dos versiones de un poema de Constantino Cavafis titulado Fui
.
Nada me retuvo. Me liberé y fui.
Hacia placeres que estaban
tanto en la realidad como en mi ser,
a través de la noche iluminada.
Y bebí un vino fuerte, como
sólo los audaces beben el placer.
.
Me desaté. Me abandoné del todo y fui.
Hacia los placeres, que medio reales,
medio imaginados en mi cerebro estaban,
fui a la noche iluminada.
Y bebí licores fuertes, como
los que beben los temerarios de la voluptuosidad
.
y me han llamado mucho la atención las diferencias en la traducción: las palabras elegidas, y la composición que con ellas forman, nos proporcionan no sólo el sentido de las frases, también un resultado estético, que las palabras forman al juntarse. Y la música, sobre todo la música resultante, el sonido de su pronunciación. FONDO Y FORMA inseparables. No sé quienes son los autores de las traducciones, y por eso no puedo poner sus nombres. Mi intención es mostrar que lo que se quiere decir, el fondo, es inseparable de los medios que se utilizan para decirlo, la forma de decirlo, y que según la forma empleada decimos algo distinto, a menudo imperceptiblemente, aunque pretendamos decir lo mismo. Me parece a mí, o paréceme a mí.

13 comentarios:

Marcela dijo...

Me quedo con la segunda traducción, me da una imagen más poética y con más fuerza de lo que es dejarse ir y lanzarse a la voluptuosiad de los sentidos, a los placeres dejando en un lado el cerebro. Me encanta kavafis y me encanta la idea de "desatarse".

Roma dijo...

mmmmmmm... no sé, no sé, Marcelilla, porque la frase:
"Y bebí un vino fuerte, como
sólo los audaces beben el placer."
es, en mi opinión, muchísimo mejor que:
"Y bebí licores fuertes, como
los que beben los temerarios de la voluptuosidad."
Audaces es una palabra que me lleva a pensar en valentía u osadía, mientras que temerarios me hace pensar en insconsciencia o imprudencia.
Creo que el sentido del poema va más por denotar la audacia del que imagina o conoce el peligro, y lo acepta o lo asume, que del que se comporta temerariamente.
Yo me quedo con la primera traducción en primer lugar por esa frase, y en segundo lugar porque el total es más recio, sobrio y recio.
No sé, es mi percepción.

Luis Rivera dijo...

Nada me ató. Me liberé de todo y me fuí.
A placeres que, medio reales,
medio soñados, rondaban mi alma,
me fuí en la noche iluminada.
Y de los más fuertes vinos bebí, como
del que beben los héroes del placer.

Y la tercera. Alianza Tres. poesia Completa. C.P. Cavafis,

Me inclino por la primera o por esta, porque "los temerarios de la voluptuosidad" me parecenuna expresión muy rebuscada.
Pero en fin, ahí teneis otra. Es el problema de la traducción, sobre todo en poesía.

Mármara dijo...

A mí me gusta la primera, porque es la que me sé de memoria. Aparece en "Poesías completas", de poesía Hiperión, traducida por José Mª Álvarez en 1976.
Aunque la segunda también tiene su encanto. Y la que aporta Luis, aunque es menos musical, tampco está mal.
Se trata de que pueden decirse las mismas cosas de diferentes manera, ¿no? Pues sí. Sólo que unas nos calan más hondo que otras.

Jesús Miramón dijo...

No creo que pueda decirse que al final el poema (sus traducciones) no valen nada. La versión de Hiperión, traducida por el poeta José Mª Álvarez, lleva publicándose ininterrumpidamente desde 1976. Yo compré el libro en 1988 y era la 15ª edición. Los miles de lectores que, contra viento y marea, vienen acercándose desde 1976 a una librería dispuestos a comprar ese libro ¡de poesía! traducido no están haciendo nada inútil. Todo lo contrario. ¿De qué otro modo acceder a la poesía griega, japonesa, alemana, rusa, extranjera? ¿Debemos renunciar a leer todos los poemas que no hayan sido escritos en las lenguas que conocemos? No, en absoluto. Lo que sucede es que si existe un género literario en el que la capacidad del traductor (capacidad literaria: creatividad) sea imprescindible ése es el de la poesía. Yo he leído muchos poemas traducidos que me han emocionado hasta el tuétano, y sé que el mérito debe repartirse más que en ningún otro caso con el traductor. Y qué si el temblor se cumple.

Por ejemplo: ojalá supiera polaco pero no sé polaco. Sin embargo me gusta mucho Adam Zagajewki (y me alegro de no habérmelo perdido)


MI ESTUDIO

Para Derek Walcott

El estudio donde trabajo tiene seis
caras como un dado.
Hay una mesa de madera de tercas
formas rústicas, un sillón
perezoso y una tetera con el labio
prominente de los Habsburgo.
Desde la ventana veo árboles escuálidos,
finas nubes y niños de la guardería,
gritando, siempre contentos.
A veces, a lo lejos, brilla la luna de un coche
o, arriba, la cáscara plateada de un avión.
Es evidente que otros no pierden el tiempo
cuando yo trabajo, buscan aventuras
en la tierra y en los grandes espacios.
El estudio donde trabajo es una camera obscura.
Pero, ¿en qué consiste realmente mi trabajo?
En una larga espera inmóvil,
en remover folios, en una paciente meditación,
en la pasividad que no convencería
a un juez de ansiosa mirada. Lentamente
escribo, como si tuviera que vivir doscientos
años. Busco imágenes inexistentes,
y si existen están enrolladas y guardadas
como la ropa de verano durante el invierno,
cuando el frío corta los labios.
Sueño con lograr una concentración absoluta;
si la encontrase tal vez dejaría de respirar.
Quizá mejor que consiga tan poco.
Aunque oigo silbar la primera nieve,
oigo la delicada melodía de la luz del día
y el amenazante gruñido de la gran ciudad.
Bebo de una fuente pequeña,
mi sed es mayor que el océano.

Deseo, Editorial Acantilado, 2005.
Traducción de Xavier Farré Vidal.

Jesús Miramón dijo...

Adam Zagajewski, que me dejé la ese (qué apellidos más raros tienen los poetas polacos... :-)

Anca Balaj dijo...

Unpost muy interesante, sobretodo la conclusión. Muy interesante...

Roma dijo...

Ahí, precisamente ahí, Luis, fue donde me quedé chafada, en esa frase de "como los que beben los temerarios de la voluptuosidad", no por nada, pero es que cuesta de deletrear, cuesta de leer, cuesta de decir en voz alta, y además como que tiene mala sonoridad, es lo que a mí no me gustó y me sorprendió tanto, pues justo la misma frase, pero en la primera traducción, me encantaba, y era la que hacía que me gustase el poema. Como del que beben los héroes del placer tampoco me ha gustado, me quedo con Como sólo los audaces beben el placer.

Uy, Detrásdelreflejo, eres traductor? te haces tú mismo las traducciones de lo que lees? es que si no... Cómo haces para evitar leer traducciones?, no sé, me lo pregunto... porque en mi caso, que me defiendo más o menos con el castellano, porque no soy ninguna especialista ni siquiera de esta lengua que es la mía, si de todo lo que he leído tuviera que haberme traducido yo misma aquellos escritos que su original no era el castellano... no sé... pero me habría perdido bastantes cosas. Quiero decir con esto que sí, que llevas razón en que en la traducción se pierden cosas que están en el original, la traducción se convierte en otra cosa, pero esta cosa puede ser buena también aunque no sean igual, aunque no sean las mismas cosas; así que sí, que eres un tanto radical, jajaaa, pero que espero que sea bueno para tu salud!

Mármara, a por ellos! ea!
Uy! pero yo en qué estoy pensando?, lo que pensaba era... decía que... sí, que es verdad... que pueden decirse las cosas de distinta manera, eso era, hummm, sí, efectivamente... unas nos calan más hondo que otras.

Jesús Miramón! de acuerdo total contigo: si el temblor se cumple.


a minúscula, es un honor tenerte paseando por aquí, me encantan tus andaduras y las consecuentes reflexiones, son verdaderamente agradables además de muy inteligentes.

y la palabrita es jodida, jo, iihkdgfr, parece que esté cabreada o que reniegue de ella misma!
(y tan jodida que era... que me toca repetir, y ahora es epeaof. Bien, pues epeaof he dicho!)

Jesús Miramón dijo...

Jesús a secas, por favor... :-)

Roma dijo...

Jesús, de ahora en adelante te diré Jesús.

Jesús Miramón dijo...

Gracias, Roma :-)

Cerillo dijo...

Me quedo (sin concocer el original) con la primera. En la poesía aún más que en otras artes la concisión es lo primero

Roma dijo...

Bienvenido, Cerillo. ;-)