lunes, diciembre 26, 2005

Me abismo en una rara ceguera...


Me abismo en una rara ceguera luminosa;
un astro, casi un alma, me ha velado la Vida.
¿Se ha prendido en mí como brillante mariposa,
o en su disco de luz he quedado prendida?

No sé...
Rara ceguera que me borras el mundo,
estrella, casi alma, con que asciendo o me hundo:
dame tu luz y vélame eternamente el mundo!

Delmira Agustini

2 comentarios:

Mármara dijo...

He tenido que leerla varias veces hasta darme cuenta de que, bueno, vale, no me importaría nada lo de la brillante mariposa,o el disco de luz, aunque preferiría no tener que hundirme ni por la luz de una estrella.

Roma dijo...

Ni se te ocurra, no, no, lo de hundirte por nada (ni siquiera por la luz de una estrella).
Pero suena bien, no?, según la lees hasta parece que la ceguera es luz. Otra de esas poesías enigmáticas que parecen tocar y despertar un nervio de nuestro centro sensor, y que nos deja sin saber qué hay ahí, qué contiene, qué dice, que tanto nos atrae.