miércoles, febrero 08, 2006

Desayuno sin dinamita



Hay mil maneras de interpretar esta caricatura (esta y cualquier otra), mil maneras en oriente y mil maneras en occidente. No hay una única manera. Por eso encuentro que es justo estar a favor de la libertad de expresión escrita, hablada, cantada, pintada, dibujada... y publicada.
Roma, dixit.

4 comentarios:

Mármara dijo...

Totalmente de acuerdo contigo. El problema que algunos se empeñan en que lo veamos todo igual que lo ven ellos (masculino y plural).

Anónimo dijo...

Por supuestísimo. Libertad, siempre.

el foliot rojo dijo...

Hoy mismo pensaba hacer una breve reflexión en mi blog al respecto de las viñetas. Es increible lo que puede dar de sí el humor gráfico: ¿dónde acabará esto?. Por cierto, vi otra de las viñetas en las que Mahoma en el paraiso les decía a los mártires que llegaban a sus puertas que pararan ya, que se les acababan las vírgenes. Me pareció muy buena. ¿Sería esa alusión a las huríes lo que ha molestado tanto en tierra de infieles? ;-)

Roma dijo...
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